Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez



Ahora que llegan las vacaciones de verano es un momento ideal para sumergirse en esta gran novela por la que se hizo mundialmente famoso el escritor colombiano Gabriel García Márquez. Seguramente todos sabéis cómo empieza: Muchos años después, frente al pelotón de fusilamiento, Aureliano Buendía había de recordar aquella tarde remota en que su padre lo llevó a conocer el hielo. Es un magnífico comienza que nos lleva sin prisa pero sin pausa a conocer la historia de los Buendía y los Iguarán en el pueblo de Macondo, ese lugar imaginario donde ocurren cosas maravillosas que, a pesar de todo, parten de la realidad: la peste del insomnio, la enfermedad del olvido, esa mujer que se alimenta de pedazos de pared, el gitano Melquíades, cuyos poderes mágicos asombran a todo el mundo... También hay una maldición que persigue a estas dos familias, que, de tanto casarse entre ellos, han caído en una endogamia enfermiza. Algún día nacerá un heredero con cola de cerdo...



De lectura amena, absorbente, maravillosamente escrita, esta novela hay que leerla en la adolescencia o primerísima juventud, que es la edad de los descubrimientos y los deslumbramientos de todo tipo : libros, películas, amores...



Que no os eche para atrás su extensión. Es de las novelas que se devoran.



Anécdota: la obra se publicó en 1967 y fue tal el éxito que obtuvo que el autor sufrió una especie de parálisis creativa: durante años no pudo escribir nada, temiendo no estar a la altura de esta novela. Afortunadamente se recuperó y siguió escribiendo.







Comentarios