La declaración, de Gemma Malley

Es el año 2140. La muerte ya no existe y los humanos han firmado una declaración comprometiéndose a no tener hijos, pues los recursos del planeta no llegarían para todos. Pero algunas parejas incumplen la ley, y los niños nacidos son apresados por los cazadores y se convierten en Excedentes, sin derechos, criados en orfanatos para convertirse en criados-esclavos de los Legales. Anna es una Excedente de quince años. Está contenta con su situación de monitora en Grange Hill, donde se prepara para ser una Empleada Valiosa. Pero esconde un pequeño secreto: tiene, escondido en el baño, un diario donde va apuntando sus reflexiones, algo totalmente prohibido. La llegada de Peter, otro Excedente de su edad que no se conforma con lo establecido y busca a toda costa huir de la institución, dará un vuelco a su vida. Además Peter conoce a los padres de Anna, y le dice que ellos la quieren...

Novela juvenil, interesante y entretenida, que recuerda, por un lado, a las novelas de orfanatos e internados, desde Jane Eyre hasta Enid Blyton, y, por otro, a las futuristas Un mundo feliz o 1984. De nuevo una distopía que nos muestra un mundo totalitario en que la gente vive atemorizada por las Autoridades y por la falta de energía y recursos básicos, aunque siempre hay ciudadanos de primera que pueden saltarse las leyes (ya sabéis, todos los animales son iguales, pero algunos más que otros). Además la novela plantea un interrogante que hace pensar: ¿es la longevidad, incluso la inmortalidad, tan maravillosa como a primera vista parece? A ver que opináis vosotros.

Para chicos/as de 14 a 16 años.